Facebook
Twitter
Youtube
App Móvil

La sociedad magdaleniense

Las excavaciones arqueológicas han revelado una intensa e importante ocupación de la cueva durante el período Magdaleniense.

Los cazadores-recolectores magdalenienses son los creadores de una de las fases culturales más ricas del Paleolítico superior europeo. Con respecto a épocas anteriores, la variedad tipológica de sus útiles se incrementan: azagayas, arpones, espátulas, barillas... son objetos de la vida cotidiana que muestran una enorme riqueza cultural.

Los restos de fauna encontrados en los yacimientos arqueológicos nos hablan de la caza como una de las actividades básicas de estos pueblos. A esto se une la evidente actividad de recolección y pesca tal y como indican los magníficos arpones hallados en Tito Bustillo.  De hecho estos utensilios han sido empleados por los especialistas como indicador cronológico y cultural.

Además de este tipo de herramientas, durante el magdaleniense continúan fabricándose varios útiles específicos y de larga tradición paleolítica para la confección de la vestimenta, como los raspadores o los punzones, siendo las agujas de hueso la novedad en ese momento.

Pero donde más sorprende la capacidad creativa de los grupos magdalenienses no es en las herramientas, realizadas con gran maestría, sino en su decoración, en la fabricación de adornos y la ejecución de objetos decorados cuya funcionalidad se desconoce. De las excavaciones realizadas en la década de 1970 en Tito Bustillo destaca la escultura de bulto redondo de una cabeza de cabra, ejecutada en asta de ciervo.

En 2001, en el curso de los trabajos desarrollados por el equipo dirigido por Rodrigo de Balbín, en una pequeña repisa de la galería a unos cuatro metros de altura sobre el suelo actual de la cueva y frente a la representación de la mano, se localizaron cuatro contornos recortados con forma de cabeza de caballo sobre huesos hioides de este mismo animal. Se trata de la única muestra de arte mueble documentada lejos de la zona de hábitat.

Este tipo de objetos son piezas muy características del Magdaleniense medio y han sido documentadas en yacimientos pirenaicos franceses (Isturitz, Enlène, Mas d´Azil) y cantábricos (La Viña, Las Caldas, La Garma). Huesos o plaquetas de piedra decoradas con grabados zoomorfos también forman parte del rico elenco de piezas destacadas.